Me decía, allá en el bañado Sur de mi país,
donde la suerte cambia a la gente, o la corrupción la esclaviza: —“La seriedad
se busca a costa del Estado, paganini”.
Me pareció algo ideológico, medio fanático;
pero le pregunté, porqué lo decía.
—Sencillo: todos los emprendimientos se hacen
a nombre del Estado. Como nos gustaría que esa seriedad llegase también al
Bañado. Mire a los ganaderos, que aplican la alianza público-privada, a la
perfección. El Estado
pone laboratorios, médicos e investigadores, para mejorar
la producción pecuaria. El particular, ganadero, se debe dedicar solo a vender
y beneficiarse, al ciento por ciento.
La fiebre de la exportación cárnica, de a
poco, a la gente le va llevando. Y considera a la ignorancia en el manejo de la
cosa pública.
Hay mucha necesidad por falta de organización
y formación, en todos los lugares del país, pero más en los bañados, centro de
gran concentración de personas de escasos recursos.
Según la TGC , la corrupción solo puede disminuir, si la
aplicación de la ley es igual para todos los habitantes, sean nacionales o
extranjeros. Si los representantes del poder, caen en corrupción, deben recibir
el mismo trato, ante una sociedad que se precie democrática, con un Estado de
derecho en libertad.
La única forma de ser considerada la seriedad,
es con el buen manejo de los bienes públicos; no con la sencilla fórmula de
beneficiarse de las cosas públicas, en perjuicio de la generalidad.
Esto es común en las corrupciones sistémicas,
que hoy, justamente, tiene el visto bueno para propagarse, del propio gobierno,
en sus tres poderes, al tener la alianza público privada.