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Mostrando las entradas con la etiqueta #corrupcionparaguay#unanotecalles

Trato social y el curacionismo

Una parroquiana de Asunción me llama y dice: “El sistema “Mensú” volvió en la capital” Según la TGC, la ignorancia siempre está al servicio de todos. Ciertamente muchos jóvenes, le expliqué a esta dignísima ciudadana, no conocerán a quienes le deban el mote de “mensú” . A los peones esclavizados de los Yerbales. Ahora, lo que ella me comentó fue la bicicleteada a los jugadores de clubes muy conocidos y grandes, alegando los dirigentes la situación social; entregando pagos diferidos a dos y tres meses, como si fueran grandes comercios. “Los jugadores de fútbol no pueden bancar sus gastos y si cambian, se les vuelve a quitar un porcentaje y eso es injusto” –resaltó la dama. Al no conocer el manejo de la ignorancia en el derecho, fácilmente en las operaciones administrativas con poder de decisión, caen en corrupción. Pero, al ser particulares son fácilmente identificables los actores, cómplices y encubridores; pero si son de la Función Pública se debe urgir para tratar d

Apuntes sociales y el curacionismo

Imagen de Pixabay. En una reunión, una parroquiana de Asunción afirmó: “La ignorancia es la única responsable de la impunidad”. Según la TGC ( Teoría General de la Corrupción ), toda ignorancia implica injusticia de los poderes. Muy pocas personas conocen la evolución del término “ignorancia”. La acepción más conocida hasta hoy, por el común de las personas es, tal vez, la relativa al analfabetismo . Pero se puede asegurar que, de ese analfabetismo o ignorancia genérica, ya se ha avanzado hacia dos escalas más. Una relativa a la falta de instrucción y otra, la más elevada y compleja , relativa a la propia negación de la ignorancia , imposibilitando distinguir ya,  lo particular de lo general. Con esto tendríamos una realidad: Gran parte de los agentes del ámbito público , pueden estar participando en actos, hechos y prácticas de corrupción sistémica (clasificación también planteada por la Teoría General de la Corrupción , 2011 ). Al tener esta claridad, ningún func

Jugando con la corrupción

Me llamó una parroquiana de Asunción y me dijo: “Se ha cometido la gran corrupción”. Según la TGC , el poder y la ignorancia, en concomitancia, forman la corrupción. Esta claridad que parece no importarle a casi nadie, es, sin embargo, ante los hechos, irrefutable. La ignominia aparente hacia este estudio, con mayor razón cuando algunos se creen dueños de los poderes de un Estado, sea en democracia o en cualquier sistema político; obedece solo a un interés circunstancial. Esto es así porque a la corrupción, solo le importan los resultados económicos que se obtengan a expensas del “Estado” o las “Instituciones”, que acumulan y administran en nombre del pueblo y cuyos representantes electos son responsables directos, si ocurre algún desliz en su mandato. “Aquí no hay duda— insistía la dama—Hubo gran corrupción , incluso documentada y a la vista”. El manejo familiar al estilo de la monarquía hereditaria, hoy día se practica en Latino América, dando como producto gobiernos gatop

La responsabilidad y la corrupción

Una parroquiana de Ca’aguazú me afirma : “La responsabilidad de los funcionarios se encuentra en todos los comportamientos corruptos en su función”. Según la TGC, la responsabilidad en la función púbilca no admite ignorancia. Esta situación afirmada por alguien que está viviendo los actos, hechos y prácticas de la corrupción sistémica, que distingue perfectamente la diferencia entre un ciudadano común y otro que está encargado de cuidar, mantener y hacer florecer, incluso, el bien común.

El fallo social y la corrupción

Una parroquiana de Pilar me dice: “Si los encargados de la política nacional olvidan aplicar la Constitución hay corrupción” Según la TGC, el poder usa la interpretación en democracia, para acomodar intereses a la ley. “La mayor preocupación de la ciudadanía y la juventud, aquí en el Paraguay es la justicia. Quién sea, lo primero que exclama es “queremos justicia” —afirmaba la mujer del sur—, sin embargo, lo primero que se siente es la injusticia”. “Hoy estamos confundidos en el interior…, si antes era mejor la “orden superior”, cuyos ejecutores eran funcionarios, hoy con viso democrático, a la ley acallan, para acolchonarse a sus cargos públicos en la República” —prosiguió. La claridad, la libertad y la virtud, no dan lugar a la confusión, al conocerse los tres grados de la ignorancia, caballito de la injusticia social. Tal vez estamos olvidando la importancia de la ciencia. Con mayor gravedad, a la ciencia social, dentro de las cuales, la política es fundamental. Y hoy,