Me decía un parroquiano del Alto Paraná :— “Tenemos que estar con el “Jesús en la boca”, para contrarrestar el ataque de los encargados, representantes nuestros, que administran los servicios públicos en los municipios; a causa de la corrupción sistémica en sus estructuras”. Según la TGC, el poder otorga la estructura perfecta para que la corrupción se desarrolle. Por eso, podríamos afirmar, sin temor a equivocación, que las instituciones municipales, deben ser mejoradas para superar el abuso de poder y de derecho, en que están incurriendo diariamente, contra sus propios electores. Deben comenzar que los ciudadanos son usuarios de servicios, que obligan en sus cargos, a prestarlos eficientemente.
Blog sobre corrupción. Artículos basados en la primera Teoría General de la Corrupción a nivel mundial. Autor y fundador del curacionismo político.