—“Aquí en nuestro país tenemos leyes claras y muy realistas contra la corrupción sistémica; pero sin la voluntad de una buena aplicación”— me decía un asunceno al hablar de los proveedores del Estado; tanto de productos como de servicios. Según la TGC, el poder que no baja la ignorancia en la ocultación, conduce a la injusticia. La costumbre de simulación, tan común en toda estructura corrupta de un Estado, es utilizada en todo poder autoritario, para callar con “participación” económica, a cualquier miembro activo de la sociedad. Así se sostiene la democracia bananera.
Blog sobre corrupción. Artículos basados en la primera Teoría General de la Corrupción a nivel mundial. Autor y fundador del curacionismo político.