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Mostrando las entradas con la etiqueta Binacionales

Salir adelante y el curacionismo

  Una parroquiana de Ciudad del Este me explica: “Debemos empezar a salir adelante. No más migajas del Estado . Es hora de ser libres” Según la TGC , el poder representa al “Estado” en democracia. Por ende, consideramos positiva la intención de esta ciudadana. Ahora, ¿cuál sería la solución para no depender del Estado? “Debemos empezar con lo poco que tenemos y sobrevivir con eso mismo hasta lograr manejar lo mucho, de la naturaleza que nuestro país nos da”. Bárbara la idea de esta señora. Su voluntad parecería de hierro como Las Residentas . Lo único que, tal vez, no tenga seguidoras y sola casi estoy seguro no puede cambiar absolutamente nada, salvo las puertas de sus vecinos, que cada día se le irán cerrando, ya que, en los países subdesarrollados , a los deseosos de salir adelante para el bien de la generalidad, se los considera “parias”. Fuimos acostumbrados a los dobles discursos y los cargos ficticios de amigos, parientes y serviles. Todo por el partido. Hoy, una

Pagar servicio y la corrupción

Una parroquiana de Pilar me dice: “Hablar de servicios sociales es aceptar la corrupción ”. Según la TGC, la ignorancia tiene a la ley para la injusticia. Nuestro sistema democrático actual, nos permite discernir, lo verdadero de lo falso, de todo cuanto ocurre en la vida social . Hay un apresuramiento en hacer y crecer en materia económica , sin medir las consecuencias de los medios humanos disponibles; para cubrir y usar esos mismos servicios sociales, tanto en construcciones físicas, como en formación de futuros operadores políticos ; becarios al amparo del erario público; confusos al no aceptar que las binacionales son también bienes públicos. “A diario conocemos, escuchamos y comprobamos corrupción en tal o cuál institución , pero nunca mejora en los servicios a la gente”, afirmaba la honorable ciudadana. “Como ejemplo, de fácil comprensión, hoy podemos nombrar a nuestro vecino — o mais grande do mundo —, donde el supuesto florecimiento en la época de sus comprome

La corrupción y la caja negra

"La caja negra" Un parroquiano del Alto Paraná me dice: “Al fin la caja negra o caja chica de los muchachos, sostenedores de la corrupción sistémica se abrirá al pueblo, según el nuevo gobierno brasilero. Veremos.” Según la TGC , si el poder busca bajar la ignorancia, que es ocultación, saldrá adelante; ante cualquier obstáculo. Esta cuestión de las binacionales, gigantescas empresas que terminan atrapando a los propios Estados, en una maraña de corrupción sistémica, no pueden seguir siendo solo una leyenda.  Esto ya lo ha aprendido, con la experiencia, el nuevo presidente del “ maior do mundo ”, ofreciendo abrir el misterio, a través de la ley, mostrando cierta claridad, libertad y virtud, para evitar cualquier duda de la gente; con respecto a los manejos sociales de los ingentes fondos producidos en las represas. Reconocimiento oficial del flagelo sistematizado Hoy justamente la máxima institución encargada del dinero público (CGR), informa que e

La corrupción y los recursos humanos

      —“Nuestro país parece que se automatizó a favor de la corrupción sistémica, a la hora de aplicar e interpretar las leyes ambientales, solo se busca imitar pero sin conocimiento, en contra de los bienes naturales”— me recalcaba un asunceno.       Según la TGC, la ignorancia en la ocultación del poder, permite crear percepción dentro de la estructura del Estado.

La corrupción y la calidad cívica

Me decía un parroquiano de Alberdi: —“Mientras la conciencia cívica no se levante, el país estará dominado por la corrupción”. Según la TGC, la ignorancia en la ocultación del poder, es la que ocasiona las emergencias y acomoda todo en cualquier sistema de gobierno. Nuestra democracia, manejada por muchos politiqueros peloteriles, resulta en la sumatoria, una cierta mejoría, al comparar, tal vez, con los Estados autoritarios a ultranza que siguen vigentes en el mundo.

La corrupción y el subdesarrollo

El subdesarrollo es un estado de necesidad, bajo la aparente prosperidad, donde en una realidad socializante, el sistema estatal utiliza a la corrupción sistémica, como “arte de magia”. Sacudirse de este sistema, muy rentable para algunos, es la materia más difícil para los pueblos; ya que caen presas del momento, sin posibilidad de encontrar la autodeterminación. Por deudas contraídas con anterioridad, que se van acumulando como una bola de nieve, en la navidad del Norte. El mundo moderno festeja la libertad; mientras los países más adelantados y prósperos, siguen disfrutando de la plata de los subdesarrollados. En éstos, la gente llora, para conseguir sombra, tierra, agua o pan, en esta navidad.

La corrupción y la venalidad pública

“Aquí en nuestro país nos conocemos todos , —me repetía sonriente un parroquiano del Bañado Sur, mientras veía pasar una cuatro por cuatro frente a él— no puede bajar la corrupción”. Según la TGC, si el poder no trata de comprender a la corrupción sistémica, cuidando sus estructuras, hay injusticia. Hasta hoy existen ciudadanos que consideran a la corrupción, solo como los hechos, actos o prácticas realizadas por alguien carente de conocimiento o falto de ética. Es decir, se hace primar lo subjetivo.

La corrupción y el crecimiento económico

“Últimamente nuestra economía está en crecimiento constante”, me decía un parroquiano del Bañado Sur. “Lo único que a la gente jamás le alcanza esta situación. Sumado al agua que retrocede lento, se parece a la corrupción sistémica: todo lo mastica” Según la TGC, si la ignorancia en la ocultación del poder, sube en la percepción popular, aumenta la injusticia social. Los golpes de la vida, son mucho más fáciles de observar; en los límites de las ciudades, donde la pobreza y la prosperidad determinan el vivir humano.

La corrupción y su verdad

Me decía un parroquiano, del Bañado Sur: “Por algo es el hombre más rico del mundo el ‘mexicano’; supo decir el porqué hay subdesarrollo, al despreciar lo técnico y científico”. Según la TGC, si la ignorancia en la ocultación del poder, no se controla y baja, tampoco habrá progreso. Todos los poderes, en un sistema democrático representativo, deben tener la posibilidad de controlarse, unos a otros. Pero aquí, siguiendo la lógica de este parroquiano, solo manda el Parlamento. Ahora hasta consiguen bajar y canjear resoluciones acomodadas, a la medida, por medio de la interpretación legal, en el Ministerio de la Función Pública.

La corrupción y las regalías

“Nuestro país debe ser, uno de los pocos del mundo, donde se sabe con precisión, el monto de lo defraudado; pero, sin que la justicia llegue. Pasando a formar parte de la corrupción sistémica del Paraguay”, me decía con vehemencia un poblador del Alto Paraná. Según la TGC, si la ignorancia en la ocultación del poder, hace estragos del mismo, la injusticia es reina. Hubo tantos hechos, actos y prácticas de corrupción sistémica, en ese largo día del poder de facto, esquilmando progresivamente al pueblo, en nombre de la supuesta democracia latinoamericana.