El sistema de la corrupción, compuesto por los dos elementos básicos, ignorancia y poder, no requiere de una voluntad plena, o consentimiento expreso de las personas, para que funcione como tal. Es decir, los eventuales agentes, solo necesitan del vicio de la ignorancia, entendida como una negación, y no como un simple desconocimiento, para que actúen dentro del sistema. Por eso, mencionamos que el vicio principal de la voluntad, en estos tiempos de la sociedad, es la ignorancia. Pero una ignorancia que tiene tres grados, que se interrelacionan según la actividad que realiza la persona, y las normas que rigen tal actividad.
Blog sobre corrupción. Artículos basados en la primera Teoría General de la Corrupción a nivel mundial. Autor y fundador del curacionismo político.