Antes
de iniciar la siguiente sección conviene precaver sobre las precisiones que
serán expuestas a continuación en lo que dimos en llamar clasificación de los Ignorantes.
En
primer lugar, se debe advertir que los prospectos presentados no son la regla
general dentro de la administración pública, los entes descentralizados, o
cualquier otra empresa vinculada al Estado.
Existen
una gran cantidad de funcionarios honestos y muy preparados, que cumplen con
verdadero orgullo sus propósitos dentro y fuera de sus cargos u labores.
Lo
que se intenta demostrar es la forma de distribución de los agentes ocasionales
o permanentes que interactúan dentro del sistema de gobierno corrupto. Es decir
dentro del sistema mismo de la corrupción.
Segundo,
la clasificación que se presenta tiene un estricto sentido didáctico y
pedagógico, y de ningún modo persigue un fin simplemente crítico, anacrónico o
ridiculizador.
Para
llegar a esta relación dentro del contexto paraguayo y a la tipificación se han
realizado numerosas observaciones y análisis sociológicos, que van en
correspondencia con la teoría funcional de la corrupción, a la cual le fue dada
en nuestro estudio una caracterización
estrictamente vinculada al fenómeno y desarrollo de la corrupción en el
Paraguay, y de esa manera establecer el nexo causal, en nuestra nación, entre
la ignorancia y la corrupción.
Y
será justamente ese nexo fundamental el que nos obligará y nos llevará de la
mano a elaborar un nuevo concepto y una nueva definición de la corrupción,
teniendo el grado de implantación en los gobiernos y la casi
profesionalización, lo cual produjo, inexorablemente, por lo desfasada de la
doctrina e inexactitud de las leyes el peor de los desenlaces para una nación
en desarrollo: la impunidad.
Realizadas
las aclaraciones pasemos a ver los tres grupos de ignorantes: Analfabetos,
Peligrosos y Acomodados.