Allá
en ese fondo, que se llama Bañado Sur, donde la cloaca es al aire libre y sus
pobladores claman por el respeto hacia sus derechos difusos; por sus hijos
dicen: “Aquí estamos siendo burlados por los politiqueros corruptos”.
Según
la TGC, si el poder pone la estructura para la corrupción sistémica, el medio
para disfrazarlo es la ignorancia.
Cuando
los actores políticos se basan en puras promesas, que finalmente son negociados
que les favorecen a ellos y a sus allegados, puede designárseles oficialmente
como politiqueros. Pueden ser identificados con nombre y apellido, por ser, la
mayoría, representantes actuales en democracia.
En
Latinoamérica los politiqueros son los incondicionales
a favor de los poderes fácticos; algunos con mucha o ninguna preparación,
pero con la más alta fidelidad al sistema.
En
nuestro país, con los recientes sucesos de procesados por corrupción, robo de
ganado y contrabando, podremos apreciar el desenlace de la administración de
justicia. Si es que puede con los mandamases de turno, ya que son sus rubros
predilectos para la sustentación politiquera.
Así
las cosas, la democracia participativa,
en libertad de acción y pensamiento, dentro de un Estado de derecho
constitucional; va construyéndose lentamente. Aunque de tanto en tanto sus
objetivos se estrellen, con la muralla de los politiqueros.
Aunque
hasta la fecha existe incredulidad, respecto de la ciencia que estudia este
flagelo de la corrupción sistémica. En los países subdesarrollados la
necesidad, sigue justificando cualquier robo al erario público.
Los
códigos de ética, de ambas Cámaras, se constituyen en documentos desconocidos;
salvo para las frases célebres, sobre la transparencia en esta o aquella
licitación.
Todo
se puede acomodar a favor de los politiqueros; hasta un chofer puede tener salario
de primer mundo. Total nada ni nadie puede discutir.
Mientras,
perdemos en las hidroeléctricas, monumentos a la corrupción sistémica,
enclavada por la ignorancia en la ocultación de los poderes, herramienta perversa
de esa pérfida “profesión” de la actualidad nacional, llamada politiquería.