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La autoridad

Una parroquiana de Asunción me dice: “Estamos mal. Las calles de Asunción invadidas de necesidades, y la autoridad…” Según la TGC, un poder sin autoridad es ignorancia. Hablar de la situación social en los países pobres, tal vez es la más triste claridad, ya que no se pueden callar las necesidades galopantes de la población en la pandemia. “Lo cierto, es que los candidatos ganadores hablan de muchas promesas” -mencionó la dama. La feria de las elecciones en países como el nuestro, casi siempre llevan el sello de corrupción sistémica ; al ser la necesidad el común denominador de la gente, en una democracia social de derecho, donde el Estado debería dar solución a la desigualdad, al no tener autoridad, va a la deriva, flotando solo en parte. “¿Cómo es que el IPS se puede desfondar si no aplica el interés general y lo hace solo con el interés particular?” El IPS fue creado sobre el interés social, de carácter general, pero con el tiempo y la corrupción sistémica se le quiere exigir como

El deseo

  Una contadora de Pilar me dice: “Si el Banco es del Estado y es multado por el Banco Central, ¿quién paga la multa?” Según la TGC el poder y sus instituciones tienen representantes, que son responsables sociales por derecho público. Aquí se plantea una corrupción sistémica muy interesante, ya que el Estado es una figura jurídica que brinda cause legal a la política en acción, donde al cometer injusticia sus representantes también configuran la corrupción sistémica. Al utilizar de esa forma sus funciones, estos representantes, tienen una responsabilidad también económica, con su peculio personal, debiendo pagar esa multa impuesta a la institución bancaria. Caso contrario, la  famosa multa, tan promocionada y publicitada como sanción, queda al hombro de todos los habitantes del país, dueños del banco, jurídicamente, en un Estado de Derecho. “¿Quiere decir que pagamos todos el “gran deseo” de los funcionarios con sueldo de primer mundo? Esto parece más una cobertura de pasivos pasados

La ambición

Una parroquiana de Yaguarón me dice: “Nunca el juicio político a los actuales ‘chicos listos’...” Según la TGC, la ignorancia hace nublar la claridad . La publicidad interesada en la vida política, confunde a la generalidad, para el aprovechamiento de los pescadores de río revuelto, tan común en los países, donde la actividad pública es vista sin otro objetivo más que el obtener ventajas de las necesidades sociales vividas actualmente. Hay mayoría de quienes ocupan el poder ; pero también utilizaban la amenaza al encargado de turno, para inclinar según convenga al “ gatopardismo ”. “Eso es muy cierto, la simulación sigue en la farsa política casera, ambiciosa…” -expresó. El país está muy dolido con la pandemia y hacer política de competencia, pisoteando resultados, da mucha pena a todos. El pueblo compara y experimenta en tormentos, si la necesidad o la barbaridad de buscar resultados inmediatos, alegando mayoría y medios, sin claridad, nombrando de tanto en tanto, que puede haber un

La tentación

Una parroquiana de Asunción me pregunta: “¿Será la prensa el motivo para delinquir?”. Según la TGC , el poder hace su interpretación en la sociedad. Aquí se plantea la gran duda, ante la claridad de los hechos públicos sobre el vivir ciudadano, donde la encargada de informar es la prensa libre, en un Estado democrático. Porque en los Estados totalitarios nadie puede opinar sin recibir el beneplácito del poder absoluto y todas las opiniones deben ser positivas al sistema. “Eso es cierto. Antes, en otra época, solo nos mirábamos y la risita, si había opiniones…” -mencionó la dama. Esa misma situación se plantea cada día, con mayor compromiso para la prensa libre. El pasado pero no olvidado, de tanto en tanto, los funcionarios no tan jóvenes piensan que el ayer ido, fue tal vez mejor; si está en los poderes, ya que nadie podía cuestionar los abusos y disparatadas cometidas por quienes se amparaban en sus cargos. “Es que la sensación y la tentación es grande en los cargos…” -comentó discr

Los giros sociales

Una parroquiana de Ciudad del Este me dice: -Siguen los giros de los políticos, sin respetar ni la pandemia. Según la TGC, el poder siempre está a la ignorancia de la ley creando injusticia. Esta injusticia es la corrupción sistémica en acción; cuyos responsables son los funcionarios públicos, de cualquier cargo. Por eso, lo primero es mirar con claridad los excedentes de los bienes a su cargo. Ya que en latinoamérica, fácilmente los bienes del Estado se confunden como privados de los funcionarios, “usando y abusando” de todos sin importar la ley. -Justamente, eso ocurre. Todos hablan de promesas pero no cumplen. Estamos en Paraguay, donde lo simple se enreda y lo justo se contamina para sostener una economía galopante; con enfermeras asimilando a los mensúes y los seudo funcionarios de las binacionales con salarios de primer mundo. La consecuencia es que cada día el país genera más necesitados de amparo. ¡Salud ya, a los obreros de blanco! Quienes batallan en la primera línea en esta

Contratos leoninos, cuestiones sociales

  Una parroquiana de Pilar me pregunta: -¿Los contratos leoninos serían corrupción sistémica en la Liga? Según la #TGC, el poder es el “blindador” de la corrupción.  Ya se ha explicado que todo poder es dividido por la ignorancia de la Ley en manos de los administradores: votados, nombrados o concursados. Por esa movimentación acorde al sistema, son, indiscutiblemente, funcionarios públicos con poderes reales. -Entonces, ¿todos los contratos de la liga, son parte del Estado…? Son organismos con cariz de independientes, a la vista de los dirigentes y empresarios, muy bien informados, para sacar ventaja desmedida, utilizando la ignorancia del derecho, cuidando sus propios intereses personales.  Tal es así, que firman contratos leoninos, interminables a la sombra de la falta muy común, cometidos en perjuicio de los niños y jóvenes deportistas, creyentes que tal o cual ayuda, puesta a los clubes y asociaciones son gratis, pensadas solo para mejorar la disciplina. Pero, en el fondo, como en

Una interpretación en la cuestión social

Una parroquiana de Asunción me dice: ¿Por qué no se puede penalizar a los de la pandemia ? Según la TGC , el derecho sin actualizar, cae en ignorancia. Aquí seguimos creyendo en un derecho penal cerrado, literal, a la hora de interpretar un caso concreto, que ha ocurrido en plena pandemia, que implica, prácticamente, un estado de emergencia. Ahora, también es cierto, que la propia Constitución ampara la Salud ante cualquier epidemia; pero, lo que los profesionales del derecho olvidan y no consideran, es que la corrupción no es solo subjetiva, con mayor razón, si afecta  a la convivencia social. Por eso le digo, que no tiene pena lo cometido en el caso de las vacunas…-insistió. Vamos a partir de la base de que la ignorancia de la ley, no se admite a ningún particular, y los funcionarios públicos tienen doble responsabilidad, con el mismo principio. Entonces, el hecho ocurrió y es una corrupción subjetiva y sistémica a la vez. Primero, por infringir lo establecido en la disposición lega