Una parroquiana de Luque me dice: “Aquí los concejales juraron a “lo Luque”, para no negar su origen”.
Según la TGC, la ignorancia de la ley divide a todo poder.
Si la Constitución nombra expresamente que un condenado con sentencia no puede formar parte, es superior a lo establecido en el reglamento de la Junta o de cualquier otra ley. Entonces, si los responsables piensan poner en práctica que un acto de juramento no se puede suspender, se debe aclarar que nadie puede transgredir un precepto constitucional.
“He allí que todo se hizo “a lo Luque”; todo a los apurones”. Con mucho ruido y poca claridad a la hora de cumplir los preceptos constitucionales”, opinó.
Pero, estamos en Paraguay, donde es común la idea de pretender interpretar hasta la propia Ley Madre, en un sistema social de derecho democrático.
“Acá se demuestra lo “mau” y la farsa de los supuestos políticos”, aseveró.
Si lo irregular se vuelve regular no sabemos que más barbaridades pueden ocurrir en todo el país.
De a poco nos damos cuenta de la falta total de ética en algunos nombrados como los representantes de una ciudad. Sería la preparación más clara de la corrupción sistémica que está adueñándose del país.
“Otros dicen que nunca se llega a lo profundo en todas las acusaciones”, agregó.
Eso podría suceder fácilmente en nuestro país, ya que la ideología en los casos investigados están con viso de interés particular, muchas veces de carácter partidario, no queriendo admitir que la madre de todo es la corrupción, utilizada en los poderes en perjuicio de todos; con nombre de Estado social.
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